"Es la compasión del hombre hacia los animales
lo que le hace un verdadero hombre"
Alberto Schweitzer
A poco que te muevas, a poco que viajes, cada vez te resultará más fácil tropezar con imágenes en la línea de la que hoy elegí compartir: corresponde a la instantánea tomada en una esquina del popular barrio del Trastevere, en Roma.
En el interior del cubículo, que se molestaron en aislar levantando del suelo y revistiéndolo con planchas de porexpan sestea, tan cómoda como despreocupadamente, un gato callejero...
Sobre su vivienda una nota plastificada, que en italiano viene a invitar diciendo:
"Gracias por la comida que únicamente puede dejarse en los platos".
Al menos es algo que estamos haciendo bien: nuestra sociedad, que evoluciona ganando realmente poco o nada en humanidad, se preocupa cada vez más de sus animales.
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